sábado, 9 de junio de 2007

Cóndores del mar: Historia de la Aviación Naval

Carlos Cueva Arévalo

Cuando el 9 de diciembre de 1919 se creó el nuevo Ministerio de Marina como una entidad independiente del ministerio de Guerra, en la nueva organización se contempló el establecimiento del Servicio de Hidroaviación. El presidente Augusto B. Leguía tenía ya un claro concepto de la importancia de la marina de guerra para la seguridad nacional; asimismo, captaba que la aviación, después de la Primera Guerra Mundial, se erigía como la moderna arma que revolucionaba el concepto de la guerra moderna, complementaba y hasta se hacía imprescindible para el poder naval. Se formó el cuerpo de aviadores navales con el hijo del presidente; Juan Leguía Swayne como jefe del servicio de Hidroaviación. El 12 de mayo de 1920 ingresó la primera promoción de aviación naval, constituida pe 12 oficiales de Marina y dos alumnos civiles. El local se instaló en el puerto de ancón, al norte de Lima, y cuando el 27 de enero de 1921 se inauguraba, contaba con 12 aeronaves, de las entonces conocidas como “botes voladores”. El 12 de may se graduaba esta primera promoción de aviadores navales. Después de un periodo de recesión de la escuela, y dentro de los alcances del convenio con la Misión Naval Americana en el Perú, se contrató un oficial de la aviación naval de EE.UU. para reorganizar el servicio de hidroaviación con la misma concepción técnica y organizativa de la marina de guerra americana. El oficial designado fue el Lt. Cdr. USN Harold B. Grow. A partir de este momento la aviación naval adquiere una definida presencia en la marina de guerra peruana. Se adquirieron tres hidroaviones Boeing HS-21. El entrenamiento y preparación académica de los alumnos era similar a la que se daba en la escuela de Pensacola de la aviación naval americana, con una estricta disciplina y un claro concepto del cumplimiento del deber que definía la mística del cuerpo de aviación naval.
Un acápite interesante del libro es el referido a la actuación de la aviación naval en la Amazonía peruana, en el periodo de 1927 a 1929. Refiere también sobre la unificación de los servicios aéreos, de 1929 a 1933; el interregno de 1933 a 1963, en el que sustenta la necesidad de que la Marina de Guerra del Perú cuente con una eficiente aviación naval; el servicio aeronaval entre 1963 y 1966; la escuela naval de San Juan de Marcona, de 1966 a 1977; el servicio aeronaval como fuerza operativa , de 1977 a 1991; los nuevos escenarios y desafíos ad portas del nuevo milenio: una crónica actual; y sobre el personal: el espíritu de la aviación naval. Están registradas las aeronaves que han constituido la fuerza a través de su vida institucional, con una relación descriptiva de cada una de las unidades.

viernes, 8 de junio de 2007

Federico Salmón de la Jara y la Historia Marítima del Perú



Nació el 17 de febrero de 1911. A los 15 años de edad se presentó a la Escuela Naval del Perú como cadete de primer año. Al graduarse en enero de 1932 de alférez de fragata, dio comienzo a su carrera de oficial de Marina, en la que cumpliría una brillante trayectoria de 45 años en el servicio activo y, ya en el retiro, continúa sirviendo al país desde el Instituto de Estudios Histórico Marítimos del Perú.

El destino lo llamó a desempeñar roles protagónicos en los que dio ese plus de entrega que distingue al hombre superior. En 1959, condujo de Inglaterra al Callao el recién adquirido crucero BAP Almirante Grau, antes HMS Newfoundland. En 1968, el Gobierno le encomendó reorganizar la Compañía Peruana de Vapores. En 1973, al concluir su gestión, dejaba una entidad exitosa y productiva con una moderna flota de más de 12 unidades, y nuevos tráficos de operación: la bandera peruana estaba presente en todos los mares del mundo.

La nave más relevante bajo su comando fue la Historia Marítima del Perú, monumental obra en la que el Mar es el Gran Personaje. En1963, con Luis Felipe Villena, propiciaron la creación de la Comisión para Escribir la Historia Marítima del Perú. Un selecto grupo de científicos, historiadores y marinos pusieron manos a la obra y en 1972 salía a la luz el primer tomo; a la fecha se han publicado 24 v. En 1973 la Comisión dio paso a lo que ahora es el Instituto de Estudios Histórico Marítimos del Perú, del cual es su presidente honorario y vitalicio.

El 15 de marzo ha sido presentado en el Centro Naval del Perú el libro: “Federico Salmón de la Jara, marino y caballero ejemplar” que el Instituto de Estudios Histórico Marítimos del Perú publica en homenaje de su fundador. El día 13, don Federico había sido condecorado con la Orden El Sol del Perú en el Grado de Gran Cruz, por su trayectoria profesional dedicada a la defensa del patrimonio e intereses nacionales en el ámbito marítimo, fluvial y lacustre. El Canciller de la República manifestó que Don Federico representa los mejores valores de su institución y del Perú entero.

El libro reúne trabajos eruditos y tambièn testimonios personales que relievan las cualidades de líder, de honestidad, caballerosidad y bondad del almirante Salmón.